Mi sobrina regresa este domingo después de estar 2 meses fuera. Nos extraña y sabe que la extrañamos y ya le urge estar nuevamente aquí.
Ayer me envió mensaje a mi msn, pero hubo problemas de conexión y me desconecté. Me fuí a casa sin platicar mucho con ella y hoy en la mañana que volví a abrir el mensajero me apareció una ventana con sus últimos mensajes que no pude leer.
Me pedía un regalo especial como Bienvenida: Que le hiciera unos frijoles guisados tal como los hacía mi mamá.
Sé que son su fascinación, así que el sábado se los prepararé (no por nada, pero me quedan de rechupete!).
Lo vuelvo a confirmar que no se necesitan grandes lujos o cosas complicadas para ser feliz... Con cosas tan sencillas, uno puede ser dichoso.
1 comentario:
me apunto para los frijolitos estilo "mariposa" :)
Buen provecho y bienvenida la sobrinita.
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