Leyendo tranquilamente un libro ocurre que de repente un párrafo salta frente a mi y casi parece un espejo reflejando una parte escondida, a veces del alma, a veces del pensamiento.
Lo tomo con cuidado entre los dedos y lo giro suspendido en el aire para observarlo mejor. Lo toco con un dedo de la mano libre, lentamente lo acerco a mi rostro y lo olfateo. Finalmente con cuidad saco la punta de la lengua y la paso con suavidad para degustarla y constatar su sabor.
Terminada la inspección, asiento la cabeza en silencio, anoto mentalmente los datos de dónde lo leí y tranquilamente continúo la lectura donde me quedé.
«The soul selects her own society. Then, shuts the door.» Emily Dickinson
(El alma elige su propia compañía. Luego, cierra la puerta)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario