No siempre digo lo que siento
Algunos le llamarán prudencia, otros le llamarán cobardía, y dependiendo de la situación yo le llamo tarupidez.
A veces para evitar problemas callo mi enojo pero resalta a vistas mi reacción; otras ocasiones callo mi afecto hacia una persona por temor a rechazo (¡oh si! alguna vez escribí que soy timida)...
No sé realmente si es sensato o no el callar lo que uno siente, pero es algo que voy evaluando, aprendiendo y, de ser necesario, corrigiendo.
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