La película, basada en un hecho real, es impactante y dramática. Lloré en varias escenas por la intensidad del momento y la extraordinaria actuación de Sally Field.
Hubo una escena conmovedora por la ternura del diálogo, donde Sybil conoce el departamento de Richard y su hijo Mark, quienes estaban maquillados con sonrisas enormes de payasos. Sybil y Richard están por salir y el pequeño Mark (de unos 4 o 5 años), es mandado a su recámara para dormir. Se da este pequeño diálogo:
Richard- Lávate la cara, o habrá sonrisas en toda tu almohada... ... No estaría nada mal despertarse con ellas a veces, ¿verdad?
Sybil- ¿Con qué?
Richard- Con sonrisas. En toda tu almohada.
Es verdad... Es hermoso despertarse con sonrisas en toda la almohada. :)
1 comentario:
ouh! sí, que lindo despertar así.
Besos y abrazos :D
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