lunes, 5 de febrero de 2007

Bipolaridad

Hace una semana tenía problemas con una muela rota de la que solo quedaban las raíces; eso provocó que tuviese infección e inflamación pero no me dolía y finalmente la semana pasada me quitaron sin mucho percance.

Casi al tiempo de que tuve cita con el odontólogo, se me rompió otra muela (del lado contrario). Una pequeña curación y cita para la siguiente semana con el fin de hacer el arreglo a esa muela.

El problema es que desde el jueves pasado comence con un sordo dolor en la muela. De esos dolores que no son fuertes, pero constantes y oscuros (no encuentro mejor forma de describirlo). Lo peor fue que éste sábado el dolor se hizo mucho más intenso, haciendo que me doliera al mismo tiempo el oído y la angina izquierda.

Nunca había sentido un dolor así, tan molesto e intenso que me puso de terrible mal humor y no había medicina que lograra calmarme la molestia. Y el domingo estaba peor, como león enjaulado... Intenté practicar Tai Chi pero las punzadas me hacían hacer bizcos. Por suerte mi maestro es también odontólogo y me ayudó con ese calvario.

Después de que ya estaba sin tanto dolor, mi hermana y mi sobrina comentaban sobre mi cambio de humor de 180 grados. Meditando sobre ello, me asombra comprobar que un dolor puede cambiar el pensamiento, actitud, y sentimientos, incluso tener una actitud ante la vida diferente a la que tendría sin ese dolor...

Espero que JAMÁS me vuelva a dar un dolor de muelas...

2 comentarios:

::júbilo::haku:: dijo...

muchos de nuestros dolores son asi.. si los atendieramos a tiempo.. otra cosa serian

Skene dijo...

los dolores de muelas son la muerte!!!

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