jueves, 4 de mayo de 2006

Lluvias y danzas

Hace un año comentaba que las lluvias me ponían tríste-nostálgica, pero... ya me caché. En realidad estos días de lluvia mi ánimo se magnifica...

Si estoy contenta, mirar llover me hace sentir radiante; si me siento un poco triste, la lluvia me trastoca el ánimo en gran nostalgia o profunda tristeza; si me siento entusiasmada, en época de lluvia ando derramando miel... (como he estado en estos días)

Considerando estas magnificencias de mi ánimo, creo que elegí buena época para tomar mi segunda clase de danza árabe los martes, pues he iniciado con interés y curiosidad ya que es otra maestra quien da clases esos días.

Ésta maestra -por lo que observé y me comentó una compañera que también toma clases martes y jueves- enseña con mucha calma y es muy técnica, es decir, se avoca a enseñar la técnica y pulirla. Me resulta interesante pues la maestra de los jueves tiene un método diferente de enseñanza, siento más su alma en el baile. Aprender de ambas me será muy enriquecedor.

Ayer me quedé reflexionando que... Si mi primer contacto con la danza árabe hubiera sido con la maestra de los martes, mi interés se habría esfumado; conociéndome y reconociéndome, necesitaba la chispa que emana Jassiva en sus clases de los jueves para atrapar mi interés, entusiasmarme y enamorarme de la danza árabe.


Pd. Desde hace un par de semanas aproximadamente están quitando unos páneles que hay en las ventanas del edificio donde trabajo, y hoy ya está un andamio afuera de mi ventana. Me late que van a correr a mis vecinitas las palomas... Creo que extrañaré su currú-cutu-cú.

No hay comentarios.:

ShareThis