En estos días no sale el sol...

... sino tu rostro,
y en el silencio sordo del tiempo
gritan tus ojos
¡ay de estos días terribles!
¡ay de lo indescriptible!

Hoy me siento más tranquila después de la partida de mi sobrino el día de ayer; me ayudó mucho los apapchos que recibí tanto en palabras como con imágenes hermosas que me han dado. Todo debería marchar sobre ruedas pero... Comienzo a pensar que soy una hipocondríaca o una neuras de primera, porque tengo días que me sigue doliendo el dedo del pié (ese con el que dí mi mal paso); sigue con hinchazón y es muy molesto... ¿será que se parece a su dueña y hace lo que se le hincha su regalada gana?.

Tendré que sacar pronto cita en mi clínica para que me revisen nuevamente, y de paso aprovecho para limpiarme bien los oídos, así escucharé mejor los consejos de quienes me aprecian cuando me los dan...

Toshka

Ah! pero no solo por mi patita lastimada es que estos días son terribles. Hoy me dieron la noticia: ¡Se murió Toshka! La bellísima mascota jubilada de la UNAM murió la semana pasada... Yo he visto más a Miztli, quien la sustituyó, pero ahora que lo pienso... hace unos seis o siete años fuí a un partido de futbol americano Pumas vs. Águilas Blancas (clásico UNAM-IPN) y ví a lo lejos la mascota de los pumas... supongo que era Toshka.

¡Que bella era Toshka! Me da tristeza su partida... Como dijo Silvio en una entrevista a mi hermano, el Viejo Escaramujo, cuando le preguntó qué le hacía llorar. Silvio respondió que había llorado por la muerte de su padre y que también había llorado por la muerte de su perro Momo... y tras un silencio agregó: "el amor no distingue".

Eduardo, Viejo Escaramujo: "...cuando entrevisté a Silvio, en 1996, esta fue una de las preguntas que le hice: "¿por qué lloras?, ¿en que situaciones tú has llorado?". Su respuesta fue de lo más conmovedora, nomás vean qué maravilla de respuesta dio (fue uno de los momentos más emotivos de la entrevista):

Silvio: Estooo... Hace muchos años que no lloro... Hace dos años lloré, hace un año también... y fue cuando perdí a... dos perros. Hace dos años perdí a mi perra Momo y la lloré. Y.. hace...un año perdí a... a mi perro Snoopy y le lloré. Lloré a mi padre... El amor parece que no distingue entre seres humanos y animales... o sea que... ¡Nada!, realmente hay pérdidas así, inmensas, ¿no?, y que por mas que uno las comprenda... eh... realmente –no sé– la exclamación que te sale es el llanto. No creo que sea malo llorar tampoco... alivia... Pero no soy muy llorador, sinceramente.

©Eduardo Valtierra, 1996