Desde hace tiempo, al salir de la oficina en la noche, he tenido el deseo y la inquietud de irme caminando hasta mi casa, pero el cansancio y el tráfico me invitan a que mejor tome el transporte público para llegar a casita sin tanto esfuerzo.
Pero ayer, me decidí y mi sueño se cumplió: me fuí caminando del eje 10 sur todo Av. Universidad hasta M.A. de Quevedo, de ahí hasta Taxqueña, y luego a mi casa. Unos... mmmhh.. ¿10 o 20 kilómetros?. ¡Toda una aventura!
Claro! también me motivó el que ayer la ciudad estuviera en caos total, que salí a las 9 pm de la oficina, esperé transporte hasta las 10 de la noche y, al no haber nada, me lancé (como muchas personas más) a caminar tratando de llegar a nuestras respectivas casas, bajo una lluvia contínua con encharcamientos enormes; después de hora y media de mirar la ciudad con ojos nuevos, llegué a mi hogar, dulce hogar.
¡Y disfruté de este recorrido! No me importó el cansancio, ni me preocupó el squizzz-squoshhh que hacían mis zapatos después de meterme en charcos que llegaban a los tobillos. Tomé todo esto como una aventura de adolescente (aunque ya han pasado bastantes años de esa etapa).
Ayer recordé con agrado que incluso los inconvenientes de la vida son agradables cuando se toman con humor.
Mmmhh... ¿me animaré a repetir esta aventura?
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2 comentarios:
Hiciste que me acordara de un día que andabamos Ileana y yo en el centro de Querétaro caminando y de repente se solto una tormenta que quien sabe de donde salió. Pero fue toda una aventura porque no llevabamos paraguas. Y cuando llegamos al coche nos quedamos riendo un rato porque lo habíamos disfrutado como niños el poder correr bajo la lluvía y quedar empapados.
Salu2
La última vez que disfruté la lluvia como niña fué en las lluvias de primavera de este año; me sentía feliz de la lluvia, el calor y ver las jacarandas llenas de flores.
Esta ocasión disfruté la lluvia como adulta traviesa que juega a ser adolescente. ;)
Qué linda experiencia tuvieron Ileana y tú al empaparse de tal forma y gozarlo sin preocuparse. Es rico gozar de esos momentos sencillos que llenan tanto el alma.
Les mando fuertísimos abrazos para los dos.
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