viernes, 25 de marzo de 2005

Unión

Las penas crecen si se callan,
y ese filo corta sin perdón.
Y en la duda de la mente se cruza
y expone al aire el corazón. (*)


Hace un tiempo escribí un post titulado "Big Bang", donde decía que hay ocasiones en que el universo se conjunta para que algo pueda ocurrir o no. Olvidé en ese momento decir también que cuando el universo se conjunta, lleva dentro de sí una gran enseñanza.

En estos días de semana santa, pensé ir unos días con mi hermana y su familia que viven en Puebla. Llegué contenta el lunes al mediodía y transcurrió el tiempo entre risas y pláticas hasta la hora de ir a dormir. Al día siguiente recibí una llamada con un Big Bang: un familiar estaba en un fuerte problema.

Sin pensarlo dos veces, mi hermana, mi cuñado y yo nos regresamos a la ciudad para tratar de ayudar en lo posible. Mi hermano también estuvo presente. Mi hermana que vive del otro lado del gran charco y a quien casi no contacto, estuvo también al pendiente de lo que ocurría.

Fueron dos días largos y tensos, con momentos de incertidumbre, pero increíblemente intensos en lo positivo. Después de la primer impresión por la noticia me sentí tranquila, con la certeza de que todo se resolvería. Mi hermana y mi cuñado también así se sentían, y creo que también mi hermano aunque no lo comentamos.

El lento transcurrir del tiempo nos permitió unirnos más, platicar como hacía rato que no teníamos oportunidad, hacer bromas sobre lo que estaba pasando para aligerar nuestras inquietudes, compartir ideas y sentimientos, resolver problemas y dejar en el pasado viejos sentimientos negativos, apoyarnos mutuamente, sabernos más cercanos que antes a pesar de las distancias...

Ayer finalmente todo se resolvió bien. Una vez más el universo se conjuntó para hacernos reflexionar, para que mi cuñado nos recordara que no hay que perder el equilibrio y que todo saldría bien, para sentir a nuestro lado a aquellas personas que no pudieron estar ahí pero como si lo estuvieran, para hacer las paces con quienes necesitábamos hacerlo y mirarnos con ojos nuevos, para yo sentir el abrazo de mi delfín que había en sus palabras.

El universo se conjuntó para recordarme que tengo una familia excepcional y lo feliz que me siento por formar parte de ella.


Los problemas cotidianos sólo son ruido,
y al convertirse en camino
solamente lo importante escuchará.(*)


(*) Jaime Ades. "Por la ventana".

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Vengo despues de tiempo ,no por olvido si no por mente en blanco , me encanta como esta su blog ahora , se siente mas calido y mas propio de una mariposa de humo , saludos y besos desde aqui ,siga escribiendo.

Anónimo dijo...

Simpre es bueno disfrutar de la familia.

¡Besos!

Mariposa de humo dijo...

Muchas gracias por sus post, Daka y Cabeto!!!

Daka, ya porque cumplí un año más ¿me tratas de usted? uy! ahora si me sentí viejita, porque mis sobrinos me hablan de tu. :-S

Jejejej.. bueno, seré una viejita a go-go.

Nuevamente muchas gracias, y sigan escribiendo, que es un placer leerles!

ShareThis